"Leches" Vegetales

Las "leches vegetales" poseen infinitas propiedades gracias a su composición de vitaminas y minerales.

Nos protegen de enfermedades y brindan vitalidad y salud a nuestro organismo.

Las pueden consumir tanto niños como adultos. ¡A animarse a probar estas exquisiteses! 

Se pueden guardar en heladera durante 3 o 4 días.

Optemos por una alimentación sana y nutritiva. 

LECHE DE ALMENDRAS

Remojar un puñado de 15 almendras aproximadamente en un bol con agua durante un par de horas para aflojar la piel o tegumentos. Luego se pueden pelar o no según tu gusto. Colocar en una procesadora y triturarlas hasta formar un arenado. Pasar por un filtro o colar con un lienzo y disponer el líquido en un recipiente. Endulzar a gusto, ¡con miel o azúcar mascabo es aún mejor! 

¡A disfrutarla!

La almendra es una de las oleaginosas más nutritivas y es elegida por muchos por su potencial alcalino. Contiene proteínas de alto valor biológico, minerales, vitaminas y ácidos grasos esenciales que colaboran a mantener nuestro cuerpo en equilibrio. Es utilizada para cuidar el sistema nervioso. No posee contraindicaciones. 

TIP: Con el remanente de pasta de almendras se pueden hacer unas exquisitas galletitas con harina integral y azúcar mascabo.

LECHE DE AVENA

Colocar en una cacerola media taza de avena arrollada y un litro de agua y cocinar a fuego lento hasta el hervor y mantener durante 3 minutos más revolviendo enérgicamente. Luego mezclar y dejar reposar durante 10 minutos. Licuar la preparación anterior y filtrar. 

La avena es conocida por sus importantes cantidades de fibra, ayuda a mejorar el peristaltismo intestinal y a regularnos, desincha el abdomen. Se utiliza para mejorar las afecciones de la piel e irritaciones. Excelente calidad nutritiva. 

LECHE DE SÉSAMO

Moler en molinillo tipo de café 1/4 de taza de semillas de sésamo, 

de no poseer un molinillo se pueden mixear con la minipimer. Agregar 1/2 litro de agua y pasar por una licuadora. Dejar macerar por un par de horas, filtrar y endulzar con miel o azúcar mascabo. 

Si realizamos el Tahin (manteca de sésamo) se lo puede licuar con agua para obtener la misma proporción de leche. 

La semilla de sésamo posee excelentes propiedades vitamínicas y minerales y una alta proporción de calcio en su composición que contribuye a fortalecer los huesos y músculos del cuerpo.

LECHE DE LINO

Moler en molinillo o mixear media taza de semillas de lino con 1/2 litro de agua, dejar reposar un par de horas, licuar, filtrar y endulzar con miel o azúcar mascabo.

La semilla de lino es conocida por sus cantidades de omega 3, importante protector cardiovascular, protege el corazón y los vasos sanguíneos y colabora a dosminuir el colesterol en sangre. Contribuye a mejorar la constipación y a regular el movimiento del intestino. Por sus cantidades de fitoestrógenos mejora los síntomas característicos del climaterio.